03 mayo 2006

Serenity, o como hacer épica postmoderna


Serenity nació siendo una serie de TV. Un proyecto personal de Joss Whedon (creador de la inefable Buffy Cazavampiros, serie y película que merecen un artículo aparte, claro está), que fracasó estrepitosamente (la cancelaron al octavo capítulo, creo), pero que se convirtio en una obra de culto para un nutrido grupo de frikis que al no ser capaces de formar un mercado rentable económicamente se constituyen en un grupo de presión social. Es un fenómeno curioso, muy repetido últimamente, fruto de la crisis de las ideas estéticas y filosóficas del mundo moderno; de la postmodernidad, o sea.

Joss Whedon quiso entonces hacer una peli en homenaje a aquel ejercito de seres inadaptados obsesivos que convirtieron la serie en una "obra de culto". Eso dijo él (bueno lo de "inadaptados obsesivos" lo digo yo), porque Joss Wendon lo da todo por sus fans (¡qué bonito!). Mentira cohina...en realidad, este inteligente productor/director tenía un plan, un buen plan.



A Joss Whedon le gusta el refrito, lo considera rentable...y muy posiblemente lo sea, cada vez más. Buffy (la peli) fracasó, pero a su guionista (Joss Whedon, claro está) su guión le seguía pareciendo cojonudo y creía firmemente que la historia de una adolescente con problemas que lucha contra vampiros podría triunfar si se transladaba a otro formato. La serie triunfó (los encantos de Sarah Michelle Gear tuvieron mucho que ver con eso), aunque de todo esto hablaremos otro día.

No hay que ser un hacha para imaginar lo que pensó Joss Whedon cuando le cancelaron la serie ("Firefly" se llamaba): "Más grande, más larga, más frikis". Pero la jugada le salio mal, y la peli fracasó en EEUU y en el resto del mundo.

Y es que Joss Wendon pecó de avaricia. El reparto (bastante competente, todo sea dicho) no era conocido, la historia se complicaba innecesariamente y la peli no innovaba nada ni en los efectos especiales ni en el argumento, aunque ese no era su objetivo.

Joss Whedon quería refundir, recrear. Un mundo futuro, un universo lejano poblado de seres humanos (no hay marcianos ni bichos verdes), ha habido un guerra y ha habido unos perdedores (los confederados) que ahora son bandidos. La mayoría de los planetas de ese lejano sistema están plagados de desiertos....bueno para que dar más pistas. Wendon ha transladado al futuro los clichés de las pelis de vaqueros. Hay robos a bancos (bastante originales), hay indios (una especie de zombis sanguinarios), hay vestuario a lo Segio Leone. Bueno, lo dicho, la peli no pretende ni de lejos ser original.

Una mierda pensareis (y la mayoría de mis amigos os diría que sí), pero en mi opinión hay detalles en la peli que la elevan por encima del resto de propuestas palomiteras/multisalas. Porque a pesar de todo lo dicho, Joss Wendon es un buen guionista (Toy Story por ejemplo) fiel a sus ideas (vean la cuarta parte de Alien y busquen similitudes con Serenity). Porque lo que realmente salva a la peli de la quema es su sentido del humor, esa ironía que le hace aceptar sus limitaciones. Sus dialogos son originales, sarcásticos, pero a veces parece que la única motivación de la acción es llevar a sus personajes a una situación en la que sus comentarios resulten graciosos e impactantes.

Lo mejor: cuando la peli desvaría. El viaje al planeta solitario... Realmente Whedon maneja muy bien el terror y crea verdadera incertidumbre en un escenario diurno, tan luminoso y onírico como nuestras más perversas pesadillas.

Lo peor: echar a perder a unos de los pocos malvados interesantes del cine actual. Imperdonable esa conversión final. Mal explicada, mal resuelta, mal, mal...

Pero nuestro amigo Joss aún es joven y podemos esperar mucho de él. Porque a pesar de todos sus vicios es evidente que nos puede dar algo más. En su generación es un tapado: carece de las habilidades de Sam Raimi o de Peter Jackson, pero estos adolecen de la gran gran virtud de Whedon: el dominio de la épica. Porque este gordinflón simpático (supongo que actor frustrado) es un maestro de la épica: sabe donde colocar la música, cómo mover la cámara, como llegar al clímax... Y lo bueno es que sigue haciendo el cine que quiere, para adolescentes, para gente como él...porque sospecho que Whedon no deja de ser uno de los frikis que no son mercado para las manufacturas de Hollywood. Ahora prepara Wonderwoman... esperemos que sus personajes hablen menos y que el guión sea lo suficientemente sencillo para que Whedon pueda centrarse en la acción y en esa épica que tanto nos gusta. Pero sospecho que no será así porque es evidente que al colega le pierde la frase graciosa, el comentario irónico... si es que es como nosotros.

1 Comments:

Publicar un comentario

<< Home